Pensamiento de un tio normal.: MI CUARTO CAMINO A SANTIAGO.

1ª ETAPA: O`CEBREIRO - FONFRIA. 13 KM.

Bueno al final ya me he decidido y voy a contar el último camino a Santiago que he realizado.

Este Camino se preparo con mucho ilusión, ya que una de las cosas que me apasiona del camino es que haya gente que nunca lo haya echo en este caso convencí a mi hermano, cosa muy rara, ya que no es la típica persona que le guste hacer este tipo de cosas, también nos preparamos unas sudaderas y camisetas con nuestros nombres, vamos que en principio todo estaba supermegapreparado para que esto saliera de categoría, pero…

Veinte días antes de comenzar el camino, cogí una neumonía que me tuvo en el hospital ingresado durante 5 días, estuve verdaderamente muy mal, todo el mundo me decía que no podría hacer el camino, pero los que realmente me conocen, saben que soy algo cabezón, hasta el ultimo día antes de partir para el Camino, tuve que hacerme un ultimo reconocimiento para ver que mis pulmones estaban limpios de la neumonía, así que podéis imaginar, lo mal que empezaba este Camino.

En principio éramos cuatro los que teníamos que irnos, Richi, Manolo (mi hermano), David y yo, el primero en caer del grupo, fue nuestro querido amigo David alias “Rufinico”, no pudo venir por que tenia que estudiar unas oposiciones, por lo que tuvo que quedarse en Valencia, para poder estudiarlas y aprobarlas, como así ha sido, es todo un campeón, si alguna vez tengo un yerno, me gustaría que fuera como mi amiguete, trabajador y súper estudiante, pero sobre todo una buena persona, como es el.

El siguiente en caer, fue mi otro amigo Richi, su pequeño se puso malito, y nos llamo el mismo día que salíamos, para decirnos que anuláramos el viaje un día, para ver si a Miguel se le pasaba la fiebre. Aquí si que nos trastocaba los planes, ya que Richi ponía el coche, para poder desplazarnos hasta O’ Cebreiro, pero claro al no venir, mi hermano y yo decidimos esperarnos un día, para ver si podía venir, pero viendo que el chiquillo no se iba a recuperar, le dijimos a Richi, que nos íbamos y si el pudiera que acudiera cuando estuviera mejor el chiquillo, pero que no se preocupara si no podía acudir, que el Camino como dice Rufinico, siempre esta allí.

Así que el día 15 de Marzo mi hermano y yo decidimos irnos con el coche de mi madre, este coche es el que lleva mi hermano, para ir a trabajar todos los días al puerto, se hará como mucho unos 15 Km. al día, así que decidimos irnos con este, mi hermano al principio lo flipaba, el coche es del año 1990, tiene un motorcete de 900 cc de gasolina, no lleva radio, no llevaba calefacción, estaba sin revisar, etc.

Total, a las cinco de la mañana salimos hacia O’ Cebreiro, el viaje se nos hizo de pesado que pensábamos que no llegábamos, nos plantamos en O ` Cebreiro a las 2 de la tarde, eso si, antes de empezar comimos de categoría en un restaurante de esta preciosa aldea, tras la comida, comenzamos a Caminar.

Vistas desde O`Cebreiro.

Con nuestro super Ferrari.

Antes de comenzar nuestra aventura.

Manolo, ansioso por empezar.

Yo, ya cansado antes de salir.

Nuestro primer mojón.

Vaya nubarrones que venian.

La primera etapa era un poco de contacto, ya que el tiempo era bastante malo y también era algo tarde, por lo que comenzamos a caminar, con los chubasqueros ya puestos, por que el día que estaba haciendo era de frío y lluvia, así que comenzamos a bajar desde O’ Cebreiro hasta Fonfria, que era nuestro primer destino. El camino para ser solo 12 Km., se no hizo bastante pesado, entre el clima y luego que llevábamos desde las 5 de la mañana metidos en un coche 9 horas a cien Km. por hora, pues la verdad es que estábamos muy muy muy cansados.

Durante esta etapa conocimos a una compañera peregrina, que no la dejaríamos hasta llegar a Santiago y que guardamos un buen recuerdo de ella, ya que era, bueno es, una persona encantadora, se llama Patricia, aunque nosotros le decíamos la “Pija”, claro esta en plan muy cariñoso, ya que la pobre, el día que la vimos iba prácticamente arrastrando su pesada mochila, eso si, en ningún momento nos pidió que le ayudáramos, pero mi hermano, viendo el estado en el que iba, le llevo los últimos 2 ó 3 Km. hasta Fonfria la mochila, aunque ella al principio no quería.

Conocemos a la Patri, en el Alto de San Roque.

Con un frances que iba echando humo, de lo rapido que andaba.

Llegamos a Fonfria y nos fuimos a un albergue privado que hay en la misma carreterucha, nuestra amiga, talvez por la desconfianza de no conocernos todavía bien, dijo que ella prefería dormir en un hostal, ya que estaba echa polvo, así que nosotros nos fuimos hasta el albergue y Patri, hacia un hostal que se veía a 100 metros.

Tras sellar las credenciales nos encontramos con Patri, que no había podido encontrar ningún hostal, ya que estaba todo cerrado, así que decidió pasar la noche, con nosotros los valencianos.

Tras una buena ducha con agua calentita, nos fuimos a cenar, bueno si se puede decir, ya que lo que hicimos fue comernos unos bocadillos en el mismo albergue, luego a dormir, que mañana empezábamos con las etapas de más de 20 Km., eso si mi hermano y yo cogimos la costumbre de después de cenar echarnos una copita del orujo mas fuerte que tuvieran, siempre nos tomábamos nuestra copita de orujo blanco, así cogiamos mejor el sueño, además como no teníamos que conducir, pues nos lo podíamos permitir.